Por los cabellos de la diosa Tarará han caído las palabras y se han vuelto pedazos, quedando reducidas a prístinos sonidos. Con ellos, la humanidad ha inventado miles de lenguas, también ha creado la poesía y la canción. Esta experiencia artística es una invitación a asistir al momento mítico en el que nace la palabra, a abrir la escucha, a limpiar la audición y explorar, de la mano de un cauto explorador y de las niñas y los niños, las ruinas del antiguo santuario de Tarará que ha sido encontrado bajo el suelo del Laboratorio Artístico Castelarium.